Hacía tiempo que deseaba entrar en este lugar, pero tenía
miedo de entrar, y más después de ver
las fotografías de algunos compañeros de cuando estaba virgen. Pero me
arme de valor y entre, y cuál fue mi sorpresa, que en su peor estado se puede
apreciar su grandeza, y la gran belleza de
antaño, días pasados, que ya nunca más volverán a ver sus mohínas paredes.