Ya no se oyen las risas de los niños huérfanos en esta vieja escuela que antes fue la casa de un corregidor, ni los pasos apresurados, torpes por el sueño de los seminaristas al ser llamados a “laudes o visperas”, ni el repicar de las campanas en el alto campanario, sólo se oye el viento que trae silencio.
Silencio roto por mis pasos, al discubrir una por una las inmensas salas de este lugar, donde se pierden los rezos, de antiguos habitantes; Temiendo no romper el silencio por miedo que algun fantasma del lugar me haga callar, al pertubar sus rezos en este abandonado lugar.
Tras los contrastes de luces en los cuadros que vi en la iglesia, subo con el alma encogida por unas escaleras que me llevaran a la parte superior del edificio donde me esperan muchas más sorpresas.
Después de varias estancias y unos pisos recorridos se encuentra esta sala que bien pudo ser otra iglesia o un claustro para los seminaristas, pero solo son especulaciones.
Restos todavía intactos de lo que es el mecanismo del campanario,
Y mientras miro el encerado, pienso que el resto de las estancias y maravillas encontradas vendrán con el próximo reportaje.
Buen comienzo para tu blog fraile, el sitio es alucinante.Sigue asi, ya tienes un seguidor mas. un saludo.
ResponderEliminarEnhorabuena por e lreportaje, empezamos fuertes! a seguir así,un saludo.
ResponderEliminarGracias por el apoyo, lo dificil sera mantener la calidad de los lugares, espero poder consegirlo.
ResponderEliminarPues te quedaron buenas fotos, me gustan las del pasillo que parece de estilo arabe. Saludos.
ResponderEliminarFRAILE pero esta maravilla esta abandonada?
ResponderEliminardime donde jajajajajaja!!!!!!!!
Julia, no me pidas localizaciones
ResponderEliminarEres un sol!!!!!!!!!!
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